Hoy no soy yo la cocinera de esta receta, tengo la suerte de que un buen compañero me propuso la idea de paticipar cada uno en el blog del otro. Tengo que decir que su receta ha llegado mucho antes que lo que yo debo enviarle así que lo primero de todo pedirle paciencia.
Y también me alegra que esta sea mi entrada número 100 en el blog, hay que ver como ha pasado el tiempo, por que es la mejor manera de celebrarlo.
Y también me alegra que esta sea mi entrada número 100 en el blog, hay que ver como ha pasado el tiempo, por que es la mejor manera de celebrarlo.
Campos de Hispania esun blog que va más allá de la cocina, nos enseña sus partes ocultas, sus peculiaridades y nos enseña los tesoros que hay a lo largo de nuestro país. Sin más dilación os dejo con su estupendísima receta y espero que os paséis a visitarle por que merece la pena.
¡Hola hispánicos!
¡Uy!, ¡Perdón, qué en está ocasión
escribimos para masque4paredes! Somos los compañeros del blog Campos de Hispania. Queremos
dar la gracias a la anfitriona del blog por permitirnos aportar nuestro granito
de arena. Por ello, os queremos traer algo muy especial, para compartirlo con
vosotros. Además, hemos hablado recientemente en nuestro blog: se
trata del Ajoarriero de Cuenca, que también recibe otras acepciones, tales como
Atascaburras o Ajoarriero de mortero. Para evitar confusiones, ya que la
palabra ajoarriero se utiliza en diferentes platos típicos españoles, el de
Cuenca se trata de una pasta de patatas, en la que el mortero, ajo y bacalao
son los elementos clave a usar. En contra de lo que se pueda pensar, es un
plato sencillo y fácil de preparar.
Ingredientes:
Para la preparación:
- 500 g de bacalao
- 500 g de patata
- 3 dientes de ajo
- 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
- Sal
Para la decoración:
- 2 huevos duros
- 100 gramos de nueces peladas
- Tostadas de pan
Elaboración:
Para empezar, pelaremos y limpiaremos
las patatas. Estás las pondremos a cocer en una olla, conjuntamente con el bacalao. Una de las maneras de
ver que ambos están listos, es cuando podemos introducir un cuchillo sin
presionar sobre las patatas. Después, cogeremos y limpiaremos el bacalao,
quitándose la piel. Luego, hay que desmigarlo y lo reservamos en un plato.
Respecto a las patatas, podemos trocearlas y dejarlas en un plato. El agua de
cocción, también podremos reservarla, porque quizás la necesitéis más
tarde.
A partir de aquí, usaremos el mortero
para unir todos los ingredientes. Antes de nada, cogeremos los ajos, los
pelaremos y los machacaremos en nuestro mortero. Acto seguido, iremos añadiendo
poco a poco la patata y el bacalao desmigado en el mortero, majando
tranquilamente, pero con energía. Haremos siempre el mismo gesto, en círculos.
Una de las cucharadas de aceite la añadiremos al principio y otra al final,
casi al finalizar el proceso. Lo mismo haremos con la sal, al gusto, pero sin
exceder. Si vemos que nos cuesta machacar los ingredientes, podemos ir
añadiendo de tanto en tanto, cucharadas de agua de cocción, sin pasarnos, ya
que lo que buscamos es una pasta homogénea, pero densa. El proceso de
machacado es costoso, pero el resultado final merece la pena. Negaremos
haber dicho esto, pero se puede recurrir a la
batidora, utilizándola a intensidad baja, ya que los ingredientes se
deben añadir poco a poco, recordando que lo primero que debemos poner es el
ajo. Lo único que la textura no será la misma y parecerá más un puré.
Y listo, ahora lo único que nos falta es
adornar el plato, con las nueces, el huevo duro y las tostadas de pan. Podéis
añadir un chorrito de aceite de oliva si os gusta. Podéis dejarlo en la nevera
tranquilamente, ya que el plato se consume frío. Os recomendamos usarlo de
muchísimas maneras. Tradicionalmente se consume como un entrante o aperitivo,
aunque si queréis podéis ponerlo como guarnición.
Esperemos que os guste.
Nota: Originalmente, el bacalao que
se utilizar para esta receta es salado. Pero en ocasiones y por falta de
tiempo, podemos recurrir a un bacalao fresco o congelado.
Si escogéis el bacalao salado, debe de estar al menos dos
días desalándose. Y controlar el uso de sal en la receta. Nosotros
escogimos bacalao fresco.